Dime como duermes y te diré que personalidad tienes.

No sólo la postura importa, también influye de qué lado de la cama duerme cada uno.

No resulta extraño que una de cada diez parejas tengan discusiones recurrentes sobre este asunto, según una encuesta realizada por la compañía hotelera Premier Inn a 2 mil adultos, de la que también se dedujo que uno de cada 20 hombres no estaba satisfecho con el resultado final de dicha discusión.

Por lo visto, el estilo de sueño de cada quien empieza por el lado de la cama que prefiere al dormir. Incluso, aquellas personas complacientes y de naturaleza tolerante que dicen que “les da igual”, “que duermen en cualquier sitio”, y que de hecho duermen a la derecha o a la izquierda de la cama indistintamente, tienen sus preferencias claras.

Las razones que se citan con más frecuencia para escoger un lado de la cama tienen que ver con tener una mejor perspectiva de la televisión, estar más cerca de los niños,  de sus objetos personales, estar lejos de los ruidos de la calle o tener más espacio en su lado.

Casi el 50% de los que respondieron la encuesta aseguraron que no podían dormir del todo cuando no lo hacían en “su lado de la cama”, y considerando que una mala noche tiene un impacto la memoria, el humor, la esperanza de vida, y hasta en la ganancia del peso, nos parece que pelearte por tu lado de la cama es una guerra que vale la pena ganar.

Posturas para dormir

La postura en la que se duerme también revela datos de la personalidad y el temperamento. Además de ser un factor que determina si al día siguiente se levantara de buen ánimo o con la cara larga.

La gente que duerme boca arriba, con la espalda totalmente apoyada en la cama y los brazos entrelazados sobre el regazo se despiertan más frescos y energéticos con ganas de comerse el mundo. Mientras los que duermen con la cara hundida en la almohada y los brazos descolgados a los lados del cuerpo, revelan una sensación de estar fuera de control, y se despiertan cansados y sin energía.

La postura más popular es la fetal (el 58% prefiere dormir de lado con las piernas y los brazos encogidos, y la cabeza oculta), una posición que se asocia con el estrés de un día laboral complicado. Luego están los que pasan por todas estas posturas en una sola noche.

Los expertos en sueño advierten además que todas estas preferencias pueden cambiar con la edad, las horas de sueño que tengamos cada noche y nuestro estilo de vida. Por ello, el profesor Chris Idzikowsky, director del Servicio de Consejo para la Calidad del sueño de Londres, asegura que nuestra postura en la cama dice mucho sobre quiénes somos y el momento de la vida que pasamos.

Después de entrevistar a mil británicos, este investigador resumió las seis posturas más comunes que escogemos para dormir y lo que revelan sobre nuestro carácter.

Posición fetal

Fue la postura escogida por el 41% de los participantes en la encuesta. En las mujeres es dos veces más frecuente este modo de dormir que en los hombres. Revela una personalidad dura, sobre todo de cara a la galería, pero mantienen un lado sensible. Pueden parecer tímidos, aunque rápidamente rompen el hielo.

Posición de tronco

Los que duermen en su lado, sin moverse demasiado, con ambos brazos a los lados del cuerpo, suelen ser personas sociables, de trato fácil, y de fiar. El estudio muestra que el 15% de las personas prefiere esta postura para dormir.

Posición de esperar algo

Aquellos que duermen sobre un lado del cuerpo, con ambos brazos extendidos y de frente al cuerpo (13% de los encuestados), como quien espera algo, es gente de mente abierta, pero críticos y a veces cínicos con sus decisiones.

Posición de soldado

Duermen sobre la espalda con ambos brazos muy pegados al cuerpo (8% de los participantes en la encuesta). Suelen ser personas reservadas, tranquilas y contenidas. La mayoría son roncadores, debido a la propia postura, lo que les deja descansar del todo durante la noche.

Posición de caída libre

Duermen boca abajo, sobre el estómago y con los brazos debajo o agarrando la almohada (7% de los encuestados). Suelen ser personas difíciles de tratar, que no se toman bien las críticas y un poco descarados.

Posición de estrella de mar

Duermen sobre las espaldas con los brazos debajo o cerca de la cabeza (5%). Suelen ser muy buenos escuchando a los otros, son serviciales, y no están cómodos cuando son el centro de atención. Con frecuencia suelen ser grandes roncadores.

Según el profesor Idzikowski, la mayoría de las personas permanecen en la misma posición durante toda la noche y solo el 5% va cambiando de postura noche a noche. El estudio también mostró que solo uno de cada diez nos cubrimos todo el cuerpo con la manta o el edredón mientras dormimos, lo normal es que cuando nos dormimos saquemos un brazo, una pierna o los dos pies.